Hazte premium Hazte premium

Treinta años después de Banca Catalana, Pujol ante el juez por su herencia oculta

El expresidente, su esposa y tres de sus hijos declaran hoy por blanqueo y fraude fiscal

Treinta años después de Banca Catalana, Pujol ante el juez por su herencia oculta inés baucells

janot guil

El expresidente de la Generalitat y «exhonorable» Jordi Pujol volverá a vérselas ante la justicia treinta años después del Caso Banca Catalana, del que salió -no sin polémica- airoso. La historia abona la tesis de inspiración lampedusiana de que en la Cataluña posfranquista todo cambia... para seguir igual.

Entonces, en 1984 Pujol fue querellado acusado de vaciar una Banca Catalana que fundó junto a su padre, Florenci, y su cuñado ante la inminencia de una bancarrota. Ahora, este martes, Pujol, su esposa, Marta Ferrusola y tres de sus siete hijos -Mireia, Marta y Pere- comparecerán ante la juez de Barcelona para rendir cuentas de un supuesto legado que recibieron a la muerte de Florenci, en 1980, y que estaba oculto en el extranjero. Probablemente en Suiza, primero, y luego en Andorra.

Aunque ante la juez podrían acogerse a su derecho a no declarar, el expresidente y su familia ya no se librarán del acoso mediático y las cámaras persiguiéndole en los juzgados. Una imagen, con todo, a la que ya está acostumbrados desde el año pasado. Del núcleo familiar que conforman el matrimonio Pujol-Ferrusola y sus siete hijos, a día de hoy sólo uno de ellos se libra de estar imputado, Josep. A los cinco citados esta mañana ante la juez -imputados por fraude fiscal y blanqueo de capitales- se suman las imputaciones por los mismos cargos que pesan sobre Jordi Pujol hijo y Oleguer, cuyas investigaciones dirige la Audiencia Nacional. Y completa la escena el único hijo de Pujol que probó en política, el exdiputado y exnúmero dos de Convergència, Oriol Pujol, imputado por cohecho, tráfico de influencias y falsedad documental en el caso de las ITV.

Como señaló la Fiscalía y secundó la juez el pasado viernes en un auto donde desestimaba la petición de revocar la imputación por parte de la defensa de los Pujol, el expresidente y su familia tienen cita ante la justicia porque hasta ahora no han aclarado el origen de los fondos que atribuyen a un legado del abuelo Florenci.

La titular del juzgado de instrucción número 31 de Barcelona, Beatriz Balfagón cree que, si bien por el momento «no cabe presumir que el origen de los fondos ocultos sea ilícito» -en alusión a las acusaciones de cobro de comisiones por obras públicas que incluía la querella origen del proceso, la del sindicato Manos Limpias- , «ello no significa que haya que aceptar a ciegas, sin realizar ninguna comprobación, la explicación ofrecida por el señor Pujol, primero en su comunicado y, luego, en su comparecencia en el Parlament, de que tal patrimonio procedía de un legado de su padre (...)».

En su confesión del pasado 25 de julio, Pujol afirmó que durante 34 años mantuvo oculto en el extranjero -no dijo dónde- un dinero legado por su padre a su esposa e hijos que, por su naturaleza, no se hizo constar en el testamento de Florenci. Sin embargo, Pujol sigue sin acreditar documentalmente este supuesto legado recibido en 1980 y sólo ha apuntado una cifra estimada de su importe, 850.000 euros. Un importe que difícilmente explica el ingente patrimonio atesorado por el clan desde 1980 a hoy.

Otro argumento de la defensa de Pujol es que los cinco imputados, además de Oleguer (aún no imputado por la juez de Barcelona) ya regularizaron su situación ante Hacienda el pasado julio. Fue tras trascender sus cuentas en Andorra en la prensa y en el mes en que elexpresidente confesó la evasión fiscal . Falta que la Agencia Tributaria valide esta regularización, que sirvió para aflorar el patrimonio de la familia (ver gráfico), y de hacerlo, no cabría proseguir el proceso, sostiene el abogado de los Pujol, Cristóbal Martell.

Con todo, instructora consideró que, más que la regularización de los fondos ocultos, lo «realmente trascendente» en esta causa es «la ocultación de unos fondos en el extranjero cuyo importe real no queda aclarado», a lo que se añaden «las escasas explicaciones ofrecidas sobre éstos y la nula acreditación de las operaciones realizadas con ellos durante más de treinta años». De todo ello deberán responder mañana Pujol y su familia. Si es que no optan por callar, como hizo Oriol Pujol este mes ante la juez del caso ITV...

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación