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«Esto era una niña que estaba durmiendo y alguien intentó ahogarla»

Así narró Asunta a la madre de una amiga el episodio en el que «un hombre de negro» trató de asfixiarla mientras dormía

«Esto era una niña que estaba durmiendo y alguien intentó ahogarla» EFE

patricia abet

«Esto era una niña que estaba durmiendo y alguien intentó ahogarla. La niña soy yo y lo que te estoy contando es cierto ». Así relató Asunta Basterra a la madre de una de sus amigas el episodio en el que un hombre de negro entró de madrugada en su habitación y trató de asfixiarla . Según el testimonio que la testigo ha ofrecido este miércoles en el marco del juicio por el crimen de la niña, « Asunta estaba muy alterada ... yo nunca la había visto así». «En ese momento llamé a la madre desde el coche. Ella me dijo que era cierto. Escucharon todos porque tenía puesto el manos libres y Rosario le dijo a Asunta que había sido muy valiente », ha apuntado a preguntas de la Fiscalía . Durante la sesión de hoy también han prestado declaración varias de las profesoras de la menor, que han explicado cómo la niña llegó a clase « drogada y como sonámbula ». « No coordinaba, no miraba a los ojos y no respondía », ha descrito una de las docentes de la escuela de música donde Asunta recibía clases.

Sobre el día posterior a la muerte de la niña, una de las madres de sus amigas de ballet ha relatado un episodio «extraño» con Rosario en el tanatorio. «Se la veía compungida pero me miraba de lado y estaba intentado evitarme. Le agarré el brazo para abrazarla , me dijo que no podía ver a mis niños delante se puso a chillar, perdió los nervios y alguien la apartó. Estaba más inconsolable la señora que la cuidaba que ella», ha manifestado ante el tribunal popular encargado de juzgar el caso. La cuidadora de Asunta, por su parte, ha señalado que los padres nunca fueron a visitarla durante las vacaciones ( en Semana Santa, mayo y verano ) que la menor pasó con ella en su cada de la aldea. Sobre la fallecida, ha indicado, entre sollozos, que « Asunta era una niña perfecta, perfecta en todo. Era muy madura ». Por su parte, una de las vecinas del bloque donde residía Rosario Porto explicó, a propósito del episodio de intento de asfixia, que «le extrañó lo que Rosario me contó porque mis perros siempre ladran cuando alguien entra en el edificio» y esa madrugada «no hubo ningún ruido

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